Hopus
Si bien Bélgica se caracteriza por su gran y exquisita variedad de cervezas, esta cerveza en particular es única. Es producida por la cervecería Lefebure en Quenast Bélgica. Fue Luis Lefebure quien en el año 1876 inaugurara esta empresa que hasta el día de hoy sigue siendo familiar. Su legado sigue deleitando a sus consumidores y amantes de la buena cerveza. Su nombre según una versión que comparto, procede del inglés "hop" que significa "lúpulo" y del latín opus que significa obra, podríamos concluir que su nombre, hace mención a "la obra del lúpulo".
En lo particular una cerveza que me encantó por su amargor, aroma y peculiar botella de tapón mecánico, que la hace muy atractiva. Esta cerveza suele servirse en copa alta (o tulipa) y sus sedimientos o restos de la levadura, que quedan en el fondo de la botella, producto de la segunda fermentación, se agregan en un "chupito" o como bien los conocemos "un tequilero". En fin, cada productor busca provocar una experiencia agradable y distinta de sus marcas, ofreciendo en el mercado un valor diferencial.
Imagen recuperada de: www.bebebeer.com
Dentro de sus principales características encontramos que es una cerveza, catalogada por muchos, como una Ale, probablemente por su ligero amargor. Es un cerveza fuerte y con cuerpo, posee 8.3% de alcohol, además está elaborada por cinco distintos tipos de lúpulo, su espuma es densa y permanente, coronando la copa, casi de principio a fin.
Si tuviera nuevamente la dicha de viajar a Bélgica, Hopus sería una cerveza que volvería a comprar y ojalá la pudiera degustar en un bar de la bellísima ciudad de Brujas, escuchando la hermosa música de su campanario "Belfort van Brugge" que data del año 1240. ¡Salucita!
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